A pesar del elevado costo del aguacate, el cual, al momento asciende hasta 70 y 90 pesos el kilo, este producto constituye un manjar para los mexiquenses y un poco más si de trata de una «guacatorta».



El preparado de este platillo consta de: aguacate recién cortado de la huerta, un toque que chile, condimentos y unas gotas de limón, son los únicos ingredientes que son vertidos dentro de un pan de amasijo, deleite especial que ofrece cada lunes la señora Victoria, en la concha acústica de Toluca.
La mujer y su familia, cuya domicilio es la delegación de San Mateo Otzacatipan, en el municipio de Toluca, viaja constantemente a sus huertas ubicadas en la ciudad de Zitácuaro, Michoacán, para ofrecer este deleite a las familias de la capital mexiquense.
Y aunque no representa un alto costo el de la guacatorta, que es de 15 pesos, si ha tenido un incremento en las últimas semanas pues con anterioridad no llegaba a los 10 pesos.
El estante, denominado Tortas de guacamole Vecaat, forma parte de la expoferia de cada semana de exposición de productos Ortadif. Por ratos, los clientes hacen fila por disfrutar de esta delicia.