El sitio de la Agencia ID (Investigación y Desarrollo) dio a conocer que la Universidad del País Vasco (UPV/EHU) a través de una de sus investigadoras con una gran trayectoria en el estudio del autismo y de la relación de la oxitocina («hormona del amor») con esta enfermedad, ha demostrado que la liberación de dicha sustancia produce un aumento en la producción de un compuesto químico llamado anandamida. Esta liberación hace que los ratones muestren una preferencia por interaccionar socialmente.
Este nuevo mecanismo por el cual la oxitocina podría estar involucrada en la conducta social ha sido recientemente publicado en la prestigiosa revista científica PNAS.
Olga Peñagarikano, investigadora Ramón y Cajal del Departamento de Farmacología de la Facultad de Medicina y Odontología de la UPV/EHU, ha colaborado en su estudio con un equipo de la Universidad de California-Irvine.
El Trastorno del Espectro Autista (TEA) está caracterizado principalmente por un déficit en el comportamiento social. La oxitocina, hormona natural producida por el cerebro, está involucrada en la conducta social. Hay algunos ensayos clínicos, realizados con humanos, donde se ha demostrado que cuando la cantidad de oxitocina aumenta hay determinados aspectos que mejoran en las interacciones sociales.
«Hoy en día todavía no hay un tratamiento en el autismo para mejorar la conducta social, pero una de las terapias más prometedoras para el TEA es la manipulación del sistema de la oxitocina«, explica la investigadora.
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