Las personas que tienen mayor corteza orbitofrontal, que es una zona del cerebro situada detrás de los ojos, son más optimistas y tienen menos episodios de ansiedad.
De acuerdo con un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Illinois en Estados Unidos, la corteza orbitofrontal, mejor conocida como COF, determina la ansiedad porque integra la información intelectual y emocional, por lo que es esencial para la regulación de la conducta.
Los científicos señalan que los estudios futuros deben probar si el optimismo se puede aumentar y la ansiedad reducirse formando a personas en tareas que involucren la corteza orbitofrontal, o buscando formas de impulsar el optimismo directamente.
