La Sala de Asuntos Indígenas del Poder Judicial del Estado de México (PJEM) está ampliando el panorama de la justicia en la entidad mediante un enfoque intercultural, así lo informó Arturo Márquez González, presidente de la misma, quien destacó que los derechos de las personas pertenecientes a pueblos y comunidades originarias, están en el centro en cada proceso judicial.

“El panorama que se abre es muy amplio, porque pone en el centro del debate a las personas que pertenecen a los pueblos y comunidades originarias, en donde se les deben respetar todos sus derechos que tienen como ciudadanos, pero además, los derechos que la ley contempla en favor de ellos, dada su calidad de indígenas para que tengan juicios justos y sentencias justas, que cuando ello no ocurre, para ello existen mecanismos como la amnistía, a efecto de reparar esas violaciones y ordenar la libertad, en este caso de la persona.”
Enfatizó que la apertura de la justicia en el Estado de México implica que, aunque no siempre es necesaria una autoadscripción explícita, la autoadscripción puede ser manifestada directamente por la persona o bien de manera implícita, cuando los jueces identifiquen que pertenecen a un pueblo o comunidad indígena, o que su localidad está inscrita en el censo de poblaciones originarias. En tales situaciones, «deben garantizarse sus derechos» de forma inmediata, indicó.
La Sala de Asuntos Indígenas, maneja un volumen de trabajo considerable, informó, y que, además de los recursos que resuelven, la Sala también emite opiniones consultivas.
Este año llevan más de 120 asuntos resueltos, y se están tramitando más:
“Recordemos que la Sala de Asuntos Indígenas, no solamente conoce de recursos, sino también emite opiniones consultivas y en este año estamos sustanciando aproximadamente cinco opiniones consultivas. (…) La carga de trabajo es importante porque he señalado cuáles son las facultades que tiene esta Sala de Asuntos Indígenas, que estamos integrados por cinco magistrados y que se va a repartir viendo los asuntos, el trabajo como va llegando y lo estamos sustanciando y resolviendo con esta nueva perspectiva”.
En cuanto al impacto de la reforma judicial, el presidente de la Sala señaló que, si bien ya existe una reforma constitucional, esta debe verse reflejada en leyes secundarias, como la Ley Orgánica del Poder Judicial del Estado de México, por lo que explicó que el futuro de la estructura del Poder Judicial y, por ende, el destino de la Sala de Asuntos Indígenas, dependerá del trabajo que se realice en el Poder Legislativo.
Finalmente, afirmó que, en caso de ser posible, la Sala estará dispuesta a emitir una opinión para la legislación de estas leyes secundarias, pues, considera pertinente la oportunidad de ofrecer una perspectiva sobre la importancia y trascendencia de la Sala de Asuntos Indígenas, buscando asegurar su continuidad y relevancia en el sistema de justicia mexiquense.