Este viernes se conmemora el Día Mundial de la Lucha contra la Depresión, un trastorno que afecta a más de 300 millones de personas en el mundo. El objetivo de esta fecha es sensibilizar, orientar y prevenir a la población sobre esta enfermedad y es que persisten los mitos de que la depresión no es real, que es pereza, se mejora por sí sola, los niños no se deprimen, los hombres no la padecen, se es débil, se puede fingir o solo es consecuencia de un hecho traumático.
La depresión tiene que ver con el funcionamiento de los neurotransmisores cerebrales, definidos como aquellas sustancias químicas que ayudan a la transmisión de mensajes entre las células nerviosas del cerebro, por eso es importante acudir con un profesional para que haga una valoración adecuada; en este caso psicólogo o siquiatra.
Entre los principales rasgos que caracterizan a la depresión destacan la tristeza permanente, la pérdida de interés o placer en las actividades de la vida cotidiana, aislamiento, trastornos del sueño y del apetito, falta de concentración y sensación de cansancio. La depresión afecta a personas de todas las edades aunque los adolescentes y personas adultas mayores son los grupos más afectados. Si tienes los síntomas o tus allegados los presentan no dudes en pedir ayuda, la depresión es la enfermedad de este siglo, la primer causa mundial de discapacidad.