El gobernador Rod Blagojevich apeló hoy al sentido de justicia de los legisladores y pidió que le permitan llamar testigos y escuchar cada conversación grabada, durante el juicio político en su contra en el Senado de Illinois.
Durante la cuarta sesión del juicio político que se realiza en su contra por presunto abuso de poder e intento de enriquecimiento ilícito, Blagojevich declaró que no ha hecho nada incorrecto y nunca hubo una conversación en que propusiera violar la ley.
Pidió que se le permita escuchar las grabaciones secretas de conversaciones suyas «para conocer la historia completa, sin alteraciones».
Blagojevich llegó al Capitolio a las 10:30 horas pero no entró a la sala sino hasta las 11:00, saludó nervioso al juez Thomas Fitzgerald y a los senadores, escuchó nervioso la instrucción, moviendo el anillo de una de sus manos, y de inmediato empezó su declaración hablando con rapidez.
Pronto el gobernador redujo la velocidad a su discurso, revisando de vez en cuando su hoja de apuntes, y la mayor parte del tiempo se mantuvo apoyando en el atril ambas manos.
Comenzó quejándose de las reglas del proceso, y justificó su recorrido por las televisoras nacionales para contar a la población su versión.
