Investigadores de la Asociación Argentina de Nutricionistas comprobaron que la deshidratación leve repercute en el estado de ánimo de las personas.
Los nutriólogos aseguran que tomar agua ayuda a mantener el control de peso y tener una piel tersa, pero los nuevos resultados revelan que mejoran la concentración, la memoria y contribuye a tener mejor humor.
El agua, además de mejorar las funciones cognitivas, reduce la tensión, aumenta la calma y las sensaciones positivas de felicidad.
Las personas que participaron en el estudio y que tomaron la cantidad de agua recomendada, aseguraron tener menos fatiga, confusión, somnolencia y menos sed, mientras que aquellos que consumían mayor cantidad de agua y redujeron su ingesta habitual presentaron impactos negativos en su humor, sed, impaciencia y en general menos sentimientos positivos.
Para obtener los beneficios de este líquido, los expertos recomiendan tomar ocho vasos de agua al día.