María Vicenta Steller Alberich, especialista del Centro Interamericano de Recursos del Agua, de la Universidad Autónoma del Estado de México, refirió que la contaminación actual del Rio Lerma es grave porque es muy alta y de muy diversos tipos.
Recalcó que esto se debe a que recibe descargas residuales tanto de zonas urbanas como industriales, es por ello que dijo no tiene vida, toda vez que el Río Lerma se ha convertido en el principal canal de desagüe.
Y es que el Río Lerma se origina en los manantiales del municipio de Almoloya del Río, en el estado de México, atraviesa hacia el noroeste del Valle de Toluca, y desagua en el lago de Chapala.
Situación que empeora con la actual temporada de secas, pues al no tener agua de lluvia, no tiene con que mezclarse y sólo recibe las aguas residuales, es decir, aquellas descargas de agua sucia de puntos urbanizados.
Por lo que aseguró si las aguas residuales que recibe el Rio Lerma no son tratadas debidamente empeoraran la situación actual de dicho afluente, “el olor y color es consecuencia de las aguas residuales, para poder sanear el Rio Lerma es necesario que las plantas de tratamiento funcionen adecuadamente.
La especialista del Centro Interamericano de Recursos del Agua, de la Universidad Autónoma del Estado de México, refirió que son los municipios de Toluca y Metepec los que mayores plantas de tratamiento tienen.
