Este domingo con el inicio del adviento, comienza también el calendario litúrgico de la religión católica, que representa un periodo de cuatro semanas de preparación antes del natalicio de Jesús y con él, llegue la Navidad.
Durante este periodo de penitencia y espera, similar al tiempo de cuaresma, los creyentes se preparan y llevan la cuenta con una corona, la cual, su forma en círculo y las cuatro velas que representan el morado, color de profundización espiritual y preparación en las velas correspondientes a las tres primeras semanas de Adviento; el color rosado se usa en la misa del Domingo Gaudete (la tercera semana de Adviento), y resulta de la mezcla del morado con el blanco, para indicar la cercanía de Navidad; finalmente, en algunas coronas de Adviento se pone una quinta vela, más grande y de color blanco, que se enciende el día de Navidad.
Por lo que miles de católicos acudieron a las diferentes parroquias de sus comunidades e incluso a la misma catedral para bendecir sus coronas y en un sondeo realizado por el equipo de Así Sucede a amas de casa, admiten que llegan a gastar entre 20 hasta 300 pesos en sus coronas.
La corona que consiste en una base de metal decorada con escarcha, moños, luces, y con las 4 velas que representan cada semana, las amas de casa sondeadas admiten que en ocasiones son reutilizadas en su totalidad y en otras ocasiones solo se remplazan las velas dependiendo del deterioro que puedan tener o porque no les gusta conservarlas todo un año.
Mientras, los sacerdotes en su homilía invitan a reflexionar y pensar sobre la vida eterna, pues es un momento de esperanza.