El incremento en los salarios, anunciado hace algunos días, no cayó bien a todos los sectores, para las micro y pequeñas empresas que aportan hasta el 80 por ciento de los empleos permanentes en el país, la carga económica es significativa y en muchos de los casos se ha comenzado a optar por otras medidas, que, de acuerdo con el presidente del Centro Patronal del Estado de México, Julián Niembro, podrían tener efectos adversos a mediano plazo.
El líder empresarial indicó que no se trata del cierre de unidades económicas, ya que estas deben seguir operando al ser fuente de ingreso de las familias, pero sí de medidas en su administración.
«Tenemos visualizado que los negocios no están desapareciendo porque al final de cuentas sostienen una familia, el problema que estamos visualizando es que se están pasando a la informalidad y están dejando los servicios de seguro social a los empleados, están haciendo negociaciones desde otro punto porque tienen que seguir trabajando».
Indicó que la carga administrativa que implica el aumento en los pagos de seguridad social, vivienda y aportaciones fiscales es muy onerosa y en muchos de los casos no llega de manera directa a los colaboradores.
Desde Coparmex, explicó que la prioridad en los próximos meses será fortalecer las cadenas de proveeduría locales, consolidar los negocios inmediatos y, de este modo, reducir costos en la operación y producción.