¿A que no te imaginas quien nació un día como hoy?, pues nada menos que Albert Einstein, uno de los genios más brillantes de la Física. Nació en 1879 en Alemania; se cuenta que en su niñez era solitario y entregado a la lectura. En su juventud los biógrafos lo describen como inconformista y rebelde, con una inmensa curiosidad y como un incansable de la ciencia.
A Einstein generalmente lo conocemos por su aportación de la Teoría de la Relatividad pero propuso otras teorías y leyes como la Ley del Efecto Fotoeléctrico que le valió el Premio Nobel de Física en 1921. A partir de esta ley, ha sido posible que los aparatos transformen luz en electricidad, como los páneles solares, el encendido automático de las farolas cuando llega la noche, el mecanismo que impide que se cierre la puerta de un elevador cuando hay alguien adelante o los alcoholímetros.
Es el científico más importante del siglo XX. Algunas de sus frases célebres son: “Si buscas resultados distintos, no hagas siempre lo mismo”, y “cuando me preguntaron sobre algún arma capaz de contrarrestar el poder de la bomba atómica yo sugerí la mejor de todas: la paz”.
