El último dato disponible de la Comisión Federal de Telecomunicaciones sobre la cantidad de celulares en México es de cien millones, equivalentes a 85 celulares por cada cien habitantes. Lo que no está dicho es cuántos de esos teléfonos corresponden a niños.
Sin embargo, en América Latina y el Caribe, 60 por ciento de los menores obtiene su propio celular a los 12 años, según la Cepal, y muchos de esos teléfonos tienen acceso a internet.
¿A dónde nos lleva el uso de celulares?
A nivel de desarrollo tecnológico el futuro es incierto pues lo mismo evolucionarán que desaparecerán. El asunto de fondo es si los estamos usando para lo que fueron hechos y qué nos están aportando como sociedad y específicamente a nivel personal.
Es qué nos aportan a nivel sociedad.
Se supone que fueron creados para facilitar y agilizar la comunicación interpersonal. Pero, ¿realmente están cumpliendo es función en nuestra sociedad y más específicamente en nuestra vida personal?
¿Cuántos de nosotros nos hemos quejado del impacto del celular en las actividades cotidianas? ¿o estamos dejando hacer y dejar pasar lo que ocurra con nuestro celular?
¿Qué podemos esperar de los niños que crecen a la par de estos aparatos? ¿Cuáles retos se nos presentan como sociedad sobre el acceso y uso de celulares?
Los nacidos antes de los años 90 constantemente añoran su infancia, que tuvo lugar en la calle.