La industria automotriz nacional urgió a eliminar el Impuesto Sobre Automóviles Nuevos y la tenencia durante los años 2009 y 2010 para reactivar el mercado interno, y reiteró su llamado a mantener la regulación para la importación de autos usados.
Empresarios y distribuidores de la industria automotriz se manifiestan en la Cámara de Diputados donde exigen dar marcha atrás a la pretensión de derogar las reglas de importación de vehículos usados.
La manifestación, que se mezcló con un mitin del Sindicato Mexicano de Electricistas, quienes piden a su vez una reglamentación adecuada del sistema de pensiones, entregarán un documento al presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, César Duarte.
En el texto, exponen que de derogarse las reglas el sector podría desaparecer, pues tan solo en el último año se han perdido 25 mil empleos a los que se sumarían los 100 mil puestos perdidos.
Integrantes de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz, y de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores, entre otros, le señalan al Legislativo que la entrada de autos ilegales ha provocado severas complicaciones al sector, que registra una caída de 28% en el último año y podría sumarse otro 25% de continuar el acceso de vehículos «irregulares».
Con gritos y pancartas que dicen «queremos trabajo, los chocolates al trabajo«, en alusión a los vehículos procedentes de Estados Unidos los manifestantes reclaman que México no puede seguir siendo el patio trasero de Estados Unidos donde se arroja ese tipo de vehículos.
