Y de desarrolló la Marcha del Orgullo en la Ciudad de México con una participación aproximada de 250 mil personas según las autoridades capitalinas. Eso sí, no empezó a la hora establecida porque la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, llegó tarde pero se llevó un abucheo y la acusación de que su retraso era una burla.
Las peticiones más recurrentes de la marcha fueron amor, libertad y tolerancia, así como atención a las necesidades básicas de la comunidad. Otras fueron el derecho a existir sin ser perseguido y, la del arranque de la movilización, que “las vidas LGBT+ importan”.
Esta marcha tiene su antecedente en la madrugada del 28 de junio de 1969 cuando se realizó una una redada en un bar neoyirkino, Stonewall, donde se congregaban gays y lesbianas. Se habló de violencia en el acto y el resultado fue una serie de manifestaciones. A partir de esa fecha se busca visibilizar la diversidad sexual se creó el Día Internacional del Orgullo LGBT+. La Marcha por el Orgullo se desarrolla a nivel mundial pero esta vez se canceló en Oslo, Noruega, debido a un tiroteo.
En la marcha de la Ciudad de México hubo banderas, globos, disfraces, atuendos estrafalarios, pancartas con mensajes de todo tipo y consignas. Fue la edición más concurrida y la que tuvo lugar después de las cancelaciones por la pandemia del COVID-19. La marcha enfatiza el orgullo de ser LGBT+ y el punto es que debe importarnos.
