La hemodiálisis es un método que sirve para eliminar los desechos que se acumulan en la sangre con el objetivo de controlar la presión arterial y mantener los niveles de vitaminas y minerales en el cuerpo. Se recurre a este proceso cuando los riñones ya no tienen la capacidad para hacerlo.
Científicos, ingenieros y médicos de la University of California, San Francisco y la Vanderbilt University Medical Center trabajan en el desarrollo de un riñón artificial que imita el trabajo de uno natural.
Este dispositivo evitará la necesidad de una supervisión médica constante y la gran cantidad de fármacos inmunosupresores y medicamentos a los que se someten los pacientes, esto de acuerdo con el sitio oficial del proyecto.
El dispositivo funciona gracias a dos procesos que trabajan en conjunto. El primero consiste en la hemofiltración, donde se crea un ultrafiltrado acuoso que contiene las toxinas disueltas como azúcares y sales. El segundo es un biorreactor de células del órgano, aquí se procesa el ultrafiltrado y envía dichas toxinas de nuevo a la sangre.
Su tamaño es similar al de una taza de café y su colocación sería permanente. Se introduciría en el cuerpo del paciente por medio de una cirugía, algo muy parecido a la de untrasplante de riñón, esto bajo anestesia general.