El sector restaurantero del Estado de México no tiene previsto hacer un incremento en el costo de las bebidas derivado de la aplicación del 4.5 por ciento en impuesto a estos productos y la razón es que no son las bebidas su principal producto.
Pablo Durán Gallastegui, Presidente de la Camara de la Industria Restaurantera y de Alimentos Condimentados aseguró que la venta de bebidas alcohólicas representa apenas el 30 por ciento de las ventas totales de un restaurante y aún así su margen de utilidad en el alcohol suele ser bastante amplio
Señaló que esta retención impositiva no está destinada a los centros de consumo sino a los distribuidores como expendios y vinaterías por lo que no necesariamente habrá un incremento al precio final a los consumidores en bares o restaurantes
