En el estado de México se desarrolla el Encuentro para el Intercambio de Experiencias sobre zonas de Bajas Emisiones en la Unión Europea y América Latina.

En el foro participan con experiencias exitosas las ciudades de Madrid, Barcelona, Victoria Gasteiz, Braga, Colombia, Brasil y El Salvador, donde se han implementado acciones para reducción emisiones contaminante, mejorar la movilidad, generar entornos dignos y reducir la huella ambiental.
Para el estado de México en el año 2022 de asumió en compromiso de reducir en un 35 por ciento las emisiones contaminantes y el transporte genera aproximadamente una cuarta parte del total de emisiones contaminantes.
A través del programa «ProAire» y una serie de estudios diagnósticos se establecido la definición de zonas de bajas emisiones en 10 municipios de la entidad: Atizapán, Cuautitlán Izcalli, Naucalpan, Ecatepec, Tlalnepantla, Tultitlán, Toluca, Lerma y Metepec.
Alhely Rubio, secretaria de Medio Ambiente en la entidad señaló que el estado de México se ha preparado con instrumentos sólidos para asegurar aire limpio y una movilidad moderna a través de este programa.
“Nuestro documento rector integra ocho estrategias, 13 medidas y detalla 96 acciones operativas con el objetivo de proteger la salud de la población ante los efectos nocivos de la contaminación atmosférica. Paralelo a ello, durante esta administración se creó el «Plan Colibrí«, el impulsa una modernización estructural del sistema del transporte estatal, entre sus prioridades, se encuentra la renovación de la flotilla, la creación de corredores metropolitanos y el impulso, a modo de transporte sostenible, como el trolebús y la bicicleta”.
En la Unión Europea estas medidas tienen más de 20 años de haber iniciado con el propósito firme de mejorar la calidad del aire sin sacrificar movilidad, esto se desarrolla mediante la modernización del parque vehicular, la medición efectiva y continua de las emisiones desde el escape de los autos, la incorporación de autos eléctricos e híbridos así como una conciencia permanente de la movilidad peatonal segura con desarrollo de infraestructura.
En este marco, la zona de bajas emisiones han se han consolidado como una herramienta eficaz para revisar la contaminación, mejorarla las políticas públicas y por consecuente la calidad de vida en esas comunidades.
Las emisiones generadas por el transporte motorizado son una de las principales fuentes de contaminación atmosférica, la cual son uno de los principales riesgos que existen para la salud, ya que cada año 4.2 millones de personas en todo el mundo mueren de manera prematura por esta razón.