El sector automotriz al momento representa el 32 por ciento de las exportaciones del país y el 25 por ciento de la Inversión extranjera directa teniendo injerencia en más de 20 millones de empleos formales en el país, consolidándose como uno de los sectores productivos de mayor impacto y que se relaciona con al menos 60 ramas industriales.
La revisión de las cláusulas del Tratado de Libre Comercio así como acuerdos comerciales que México tiene con la Unión Europea, Brasil y Argentina tendrán un impacto trascendental para el futuro del sector.
Odraciel Barquera, Presidente de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) señaló que las condiciones de apertura, certeza, competitividad y fortalecimiento de la región serán determinantes para la llegada y desarrollo de inversiones.
Al momento el 17 por ciento de la producción de vehículos del mundo son fabricados en América del Norte ubicándose en la segunda posición a nivel mundial después de Asia que concentra el 60 por ciento de la producción, sin embargo Europa se acerca con el 16 por ciento por lo que los siguientes meses podrían ser determinantes para toda la región.
El presidente de Amia señaló que al momento se ha presentado a la Presidenta de la República un decálogo de prioridades y retos que tiene el sector automotriz y que está relacionado con el desarrollo de la electro movilidad como el futuro del sector:
- El desarrollo de una política integral de electro Movilidad
- Condiciones adecuadas para la operación de empresas ya establecidas y para la atracción de nuevas
- Energía suficiente, accesible, renovable y con costo accesible
- Infraestructura adecuada para el traslado de mercancías
- Y aprovechamiento y revisión de tratados internacionales
- Adaptación de las capacidades de la fuerza laboral
- Un registro vehicular eficiente y moderno
- Transparencia en la información del mercado meta
- Norma actualizar
- Es que no es de seguridad para la movilización como operación y desarrollo de los colaboradores
Señaló que además se debe buscar la generación y desarrollo de infraestructura de carga que no solo se fiscaliza en los autos compactos y personales sino en los retos que traerá consigo el transporte de carga y público a través de fuentes renovables de energía.