Masculinidad hegemónica es una ilusión y una fantasía: especialista

0
964

La masculinidad hegemónica es una ilusión y una fantasía. Los varones tratan de demostrarla continuamente, pero nunca la alcanzan, sostuvo el especialista de la Universidad de Chile, Adriano Meschi Pizarro, en la Universidad Autónoma del Estado de México. 

Este tipo de masculinidad, también nombrada tradicional o tóxica, es afín al patriarcado, a la desigualdad de género y al dominio de los hombres sobre las mujeres (Foto: redes).

Al participar en las actividades de la exposición “Re, arte contra la violencia de género” con la conferencia en línea “Nuevas masculinidades”, mencionó que este tipo de masculinidad, también nombrada tradicional o tóxica, es afín al patriarcado, a la desigualdad de género y al dominio de los hombres sobre las mujeres.  

A través de las redes sociales del Centro Cultural Universitario “Casa de las Diligencias”, detalló que entre las características de la masculinidad tóxica se encuentra la superioridad de lo masculino sobre lo femenino.  

A este tipo de masculinidad, precisó, le cuesta relacionarse con sus emociones. Del mismo modo está normada heterosexualmente y presenta una homofobia interiorizada. Hay miedo a que el varón sea percibido como homosexual y, por ello, pierda la categoría hombre. 

“También refleja una exaltación del poder, el control y la violencia como forma de relacionarse. Para solucionar algún problema es común que se empleé alguna de estas características”.  

Meschi Pizarro consideró que el sistema educativo tradicional ha impedido que los hombres resuelvan sus diferencias mediante el diálogo y la comprensión del otro. “La sociedad ha sido construida con base en el poder, el odio y la violencia”. 

Del mismo modo, apuntó que se promueve la represión emocional, ya que se educa a los varones como fríos y racionales, se les niega la oportunidad de que se sientan vulnerables, indefensos o pidan ayuda. “Se genera un daño interno, ya que, en ocasiones, no les es posible expresar cómo se sienten. Las únicas emociones que exaltan son la rabia y la violencia” 

Finalmente, aseveró que ningún varón puede cumplir con todas estas expectativas; les provoca temor. En su deseo de demostrarlo, toman decisiones arriesgadas como ingerir alcohol, hacer ejercicio en exceso y tratan de conquistar muchas mujeres. “Es una masculinidad frágil que tiene que demostrarse continuamente”. 

Comentarios

comentarios