A uno de cada cinco trabajadores mexiquenses su salario no le alcanza para comprar ni la mitad de una mini canasta básica, que sin incluir carne, frutas ni verduras, cuesta 140 pesos, contra el salario mínimo que se cotiza en 49 pesos.
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Dos salarios mínimos, percepción de la mayoría de los trabajadores en el estado de México, apenas alcanza para dos terceras partes de la mini canasta básica.