Dos tribunales colegiados ampararon y ordenaron la libertad de los autores materiales e intelectuales del homicidio del periodista Manuel Buendía, cometido en 1984. Se trata del ex titular de la desaparecida Dirección Federal de Seguridad, José Antonio Zorrilla Pérez, y de su colaborador Juan Rafael Moro Ávila, quien es nieto del ex presidente Manuel Ávila Camacho.
Autoridades del Poder Judicial de la Federación revelaron que la protección de la justicia fue concedida por el segundo y sexto tribunal colegiado en materia penal del primer circuito, respectivamente, luego de que los magistrados resolvieron que ambas personas alcanzan el beneficio de la libertad anticipada.
A las 15:30 horas, el nieto del ex presidente —quien ayer cumplió 57 años— salió por la zona de Aduanas del Reclusorio Preventivo Norte, acompañado de sus abogados Alberto Woolrich y Alfredo Genis Ávila, tras permanecer casi 20 años encarcelado, luego de que fue condenado a 25 años de prisión.
Se informó que a las 21:15 horas, José Antonio Zorrilla abandonó el Reclusorio Oriente, donde cumplía su sentencia.
Moro Ávila fue detenido cinco años después del homicidio del periodista. Su captura se produjo el 20 de junio de 1989.
Al respecto, Woolrich expresó que por fin se “hace justicia”, por lo que festejó el triunfo legal.
Por lo que hace a José Antonio Zorrilla, acusado de ser el autor intelectual y material, los magistrados del segundo tribunal colegiado confirmaron la sentencia emitida por el juez octavo de distrito de amparo en materia penal, en el sentido de que el acusado podía abandonar la cárcel por avanzada edad y porque está enfermo.
No obstante, las autoridades capitalinas no han cumplido con la ejecutoria de amparo, por lo que fueron emplazadas por la autoridad judicial. El motivo es que consideran a Zorrilla Pérez una persona peligrosa.
Desde hace tres años este ex funcionario alcanzó el beneficio de la preliberación, debido a su edad; no obstante, la administración local se ha negado a acceder a su petición, por lo cual decidió ampararse.
En 1989 el caso fue cerrado, luego de que se condenó a 35 años de prisión a Zorrilla Pérez, quien fue acusado de ser el autor intelectual del homicidio.
Días antes del homicidio, el 30 de mayo de 1984, Manuel Buendía escribió en una de sus columnas: “Ni siquiera el último día de su vida, un verdadero periodista puede considerar que llegó a la cumbre de la sabiduría y destreza. Imagino a uno de estos auténticos reporteros en pleno tránsito de esta vida a la otra y lamentándose así para sus adentros: hoy he descubierto algo importante, pero… ¡lástima que no tenga tiempo para contarlo!”