Los negocios ubicados, en el Parque nacional Insurgente Miguel Hidalgo y Costilla, mejor conocido como «La Marquesa», han registrado pérdidas de hasta el 70 por ciento en sus ventas desde que inició la pandemia de Covid-19.
Comerciantes, mencionan que pese a la apertura de sus negocios, las ventas no repuntan y en mucho se debe a la desconfianza de la ciudadanía por acudir a los puestos de comida.
Mencionan que al día venden en promedio de dos a tres platillos, lo que les deja una ganancia de por lo menos 500 0 600 pesos diarios; sin embargo, éstos son insuficientes para cubrir todas sus necesidades.
Reconocen que muchos han optado por disminuir su plantilla de personal y solo quedarse a cargo del negocio los integrantes de la familia, muchos de los cuales, han tenido que salir a emplearse en fábricas o como albañiles para salir adelante.
Es por ello que hacen un llamado a las autoridades a implementar medidas eficaces para evitar un rebrote y con ello regresar a semáforo rojo, pues dicen, que un cierre , como el vivido en los meses de marzo, abril y mayo, no podrían solventarlo.
