Hasta el día de ayer el estado de México registró 327 fallecimientos por COVID-19, a causa del síndrome respiratorio agudo causado por el nuevo coronavirus; sin embargo, los datos abiertos de la Secretaría de Salud Federal, arrojan un número mayor de muertes relacionadas con los casos negativos y pendientes, el cual, se eleva a 545 defunciones en la entidad; sólo 25 casos no tienen relación a COVID-19 ni a la neumonía.
En cuestión particular, la neumonía ha estado presente en 435 de los decesos, de los cuales 279 se relacionan con la pandemia, mientras que 156 son fallecimientos ajenos a COVID-19.
La razón de que el número de fallecimientos se eleve es por la totalidad de datos analizados a través de los casos: positivos, negativos y pendientes, lo que arroja como resultado, a la neumonía como el asesino silencioso detrás de la pandemia.
La relación entre la nueva enfermedad y la neumonía según los expertos, se puede entender si la comparamos con un cuadro gripal, que como sabemos, a algunas personas se les quita en unos días, sin más tratamiento que paracetamol para la fiebre y dolor; a otros se les complica y tendrán bronquitis que requiere otros medicamentos; y a otros se les complica todavía más, y se convierte en neumonía con sobreinfeccion de bacterias y requieren además algunos antibióticos.
Todo esto dependerá del estado inmunológico, o lo que conocemos como defensas del organismo, el cual es muy variable dependiendo de la edad, la alimentación, o también de la presencia de otras enfermedades como diabetes, obesidad, hipertensión entre otros.