En un 30 por ciento disminuyó la producción de rosa en el estado de México, debido a que los productores no han tenido recurso para recuperarse, tras los estragos que dejó la pandemia de COVID-19 en la entidad mexiquense.

Mercedes Colín Guadarrama, secretaría de Campo, refirió que los productores de flor en el estado de México se descapitalizaron, luego de las pèrdidas que dejó el Dìa de las Madres y el Dìa de Muertos del año 2020, donde los panteones permanecieron cerrados, consecuencia de la emergencia de salud.
Para este año se espera que se siembren 399 hectáreas de rosa, mismas que dejarán una derrama económica de 132 millones de pesos.
Además ya se está trabajando en la siembra de 443 hectáreas de gladiola, flor que se utiliza principalmente para llevar al panteón, la cual dejará una derrama de 57 millones de pesos. Hay que mencionar que la producción en esta flor no ha disminuido a pesar de que los panteones han estado cerrados en los últimos meses.
De igual forma se sembrará clavel, gerbera, crisantemo y lilis. Los municipios productores de flor son: Villa Guerrero, Tenancingo, Tenango, Malinalco e Ixtapan de la Sal.
Lo que convierte al estado de México en una de las entidades con mayor producción de flor a nivel nacional.