La disparidad en el tipo de cambio ha traído consigo consecuencias negativas para las empresas mexiquenses, sobre todo, para las exportadoras que tan sólo en el Valle de Toluca, reportan una caída del cuatro por ciento.
El presidente de la Confederación Patronal del Estado de México, Edgar Cerecero comentó que las variaciones que ha tenido el dólar, están poniendo en jaque a las empresas mexiquenses, principalmente a las que tienen una gran dependencia del mercado internacional, es decir, aquellas que tienen que exportar e importar sus productos.
«Desgraciadamente, esta situación nos afecta mucho, viene a agudizar más el problema que ya teníamos, por lo que no nos queda más que reforzar las medidas que estamos tomando para hacer frente a los embates de la crisis económica».
Para el empresario tal circunstancia, sin duda alguna, ocasionará un efecto inflacionario, que si bien no se puede precisar con puntualidad de qué magnitud será, si es un hecho que tendrá repercusiones no sólo para las industrias, sino para los consumidores en general.